La Consejería de Movilidad, Transporte y Vivienda ha activado el plan operativo de vialidad invernal hasta el 28 de febrero de 2023 para establecer y coordinar «de manera eficaz» los medios materiales y humanos y mantener unas «óptimas condiciones de seguridad, comodidad y fluidez» en la Red de Carreteras competencia de la Junta de Extremadura.

El dispositivo está compuesto por casi 200 personas, distribuidas en las distintas zonas de conservación y una flota de más de 120 vehículos, entre los que se encuentran 9 quitanieves, 12 todoterrenos o 14 camiones de carga. Además, hay establecidos 15 puntos de acopio con 80 toneladas de sal almacenadas.

Las operaciones básicas que se llevarán a cabo para hacer frente a las necesidades que demande la red en cada momento serán de vigilancia, tratamiento preventivo de antinieve y antihielo, tratamiento curativo con la retirada y despeje de hielo o de nieve, información al usuario y señalización del estado de puertos y carreteras.

Cabe destacar que los fenómenos meteorológicos a controlar son hielo y nieve, lluvias y nieblas, ha detallado la Junta de Extremadura en nota de prensa.

La Red de carreteras de Extremadura está formada por 103 vías con una longitud total de 4.080 kilómetros que se distribuyen en 8 zonas de conservación.

En la provincia de Badajoz las zonas son la ciudad de Badajoz, Mérida, Zafra, Castuera y en la provincia de Cáceres, la ciudad de Cáceres, Plasencia, Coria y Trujillo, además de dos zonas de conservación integral, Navalmoral de la Mata y Don Benito.

El seguimiento meteorológico se realiza mediante la recepción de los boletines emitidos por la Agencia Estatal de Meteorología y la información desde Emergencias 112, así como por el registro diario de temperatura y humedad en distintos puntos que realiza el servicio de vigilancia.

El protocolo cuenta con un dispositivo humano y material para hacer frente a los problemas que puedan surgir en la red de carreteras ante las inclemencias meteorológicas propias del invierno como nevadas o heladas.

Este documento establece y coordina todos los medios puestos a disposición para mantener unas «óptimas condiciones de seguridad, comodidad y fluidez» en la red de carreteras de la Junta de Extremadura y establece, además, las operaciones básicas de vigilancia, tratamiento e información al usuario.