Con motivo del Día Mundial contra la Trata de Personas, hoy 30 de julio, el Gobierno de la Junta de Extremadura refuerza su compromiso para continuar luchando contra esta lacra y de esta forma erradicar cualquier tipo de trata o esclavitud de la sociedad, protegiendo a quienes la sufren y restableciendo sus derechos y dignidad.

Desde la Consejería de Igualdad y Cooperación para el Desarrollo se recuerda que en ningún momento es posible hablar de igualdad, de feminismo, de un sistema democrático si no se habla y respetan los derechos más básicos, los derechos humanos, y la trata de personas atenta frontalmente contra ellos.

En este sentido, y en coordinación con las cuatro entidades que luchan contra la trata de mujeres en Extremadura, el Instituto de la Mujer de Extremadura (IMEX) está trabajando en la sensibilización y concienciación con profesionales implicados en la detección, atención y reparación del daño también de mujeres tratadas sexualmente y en contextos de prostitución, una forma de trata de personas.

Formación específica a la Policía Local, a trabajadoras sociales, educadoras sociales, abogacía, psicología… Además se trabaja con la población juvenil a través de los centros educativos y también a través de espacios y factorías de jóvenes.

Asimismo, se ha creado el Libro Blanco sobre la situación de la trata en Extremadura, cuya confección y desarrollo se llevará a cabo en los próximos meses.

Además hay que destacar que, por primera vez en Extremadura, las organizaciones que trabajan en contextos de prostitución y trata pueden acreditar la condición de víctima de trata. Todo ello a raíz del Real Decreto-ley 6/2022 de medidas extraordinarias que el gobierno de España ha puesto en marcha en respuesta a la guerra de Ucrania y que se ha materializado en la región en el Decreto-ley 2/2022 de 4 de mayo de la Junta de Extremadura.

EL 70% DE LAS VÍCTIMAS DE LA TRATA SON NIÑAS Y MUJERES

La trata de personas es utilizada en explotación sexual, trabajo, mendicidad o trabajo forzado, para vender niños y como niños soldados, así como para extraer órganos. Y no hay que olvidar que el 70% de las víctimas de la trata son niñas y mujeres y la explotación sexual es la forma más común de explotación.

El tráfico de personas es un grave delito y una grave violación de los derechos humanos. Cada año, miles de hombres, mujeres y niños caen en las manos de mafias, en sus propios países y en el extranjero.

Prácticamente todos los países del mundo están afectados por el tráfico de personas, ya sea como país de origen, tránsito o destino de las víctimas.