La Unión de Consumidores de Extremadura vuelve a denunciar la venta de juguetes acuáticos peligrosos, ya que incumplen la normativa europea de seguridad.

Por este motivo, desde la UCE, aseguran que a la hora de adquirir un flotador, unos manguitos o un objeto de agua para los menores, se debe saber qué buscar en el etiquetado del producto.

Destacan que la calidad es, en muchos casos, más importante que el propio precio del producto, ya que se trata de la seguridad de los niños, aunque también advierten que las administraciones, como responsables del control de mercado, tienen la responsabilidad para controlar que los productos que se encuentran a la venta cumplen con la normativa vigente y son seguros para los niños.

Por otra parte, afirman que es necesario replantear el mecanismo del marcado CE en los productos. La autorregulación y las declaraciones responsables de los fabricantes sirven para mejorar la calidad de los productos que encontramos en el mercado, pero también lo es el control de estos mecanismos, de manera que, si fallan, se pueda reaccionar a tiempo para así impedir que un fabricante, que haya falsificado ese marcado o lo haya incluido en productos que no lo merecen, no pueda usarlo en un periodo de tiempo. De otra forma, este marcado se convierte en un adorno.

A su vez, la Unión de Consumidores de Extremadura insta a las autoridades para que continúen con los controles preventivos que impidan la venta de productos inseguros, insistiendo en la necesidad de realizarlos con mayor frecuencia en aquellos sectores que puedan tener gran trascendencia en colectivos de especial protección, como los menores.

Además de estas advertencias, también la UCE recuerda que el ahogamiento es la segunda causa de fallecimiento accidental de menores en la Unión Europea, ya que en nuestro país cada año mueren entre 30 y 40 niños por este motivo, según datos de la Organización Mundial de la Salud.