La Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX) aboga por que sean los servicios de prevención de cada empresa quienes determinen, en cada caso, cuándo se debe aplicar el uso de la mascarilla en interior, así como la actuación ante situaciones de positivos asintomáticos, siempre en un contexto donde se considera que “no sería acertado” mantener esta restricción “en líneas generales”.

El secretario general de la CREEX, Javier Peinado, ha explicado a Efe que de cara al final de la obligatoriedad de la mascarilla en espacios interiores, previsto para el próximo miércoles, el Gabinete de Prevención de Riesgos Laborales de la entidad está informando a las empresas en este sentido.

Señala que su postura es que sean los servicios de prevención, internos o externos, quienes sean en el caso de cada empresa “quienes se pronuncien a este respecto” a tenor de las casuísticas de cada firma o a las posibilidades de contagios.

En este sentido, se hace también hincapié en que sean los servicios de prevención quienes decidan cómo actuar en el caso de trabajadores que sean positivos asintomáticos, en el objetivo de evitar los contagios.

A este respecto, Peinado ha dicho que en líneas generales se debe instar al final de esta restricción en las empresas, en línea a lo expresado por las administraciones, pero “no como una obligación», por lo que cada empleado tendrá la «decisión personal” de su uso o no.

Peinado considera que “no sería positivo que las empresas obligaran” como imperativo general al uso de la mascarilla en interior, pues “sería un contrasentido” en relación a la postura de Salud Pública.

No obstante, ha matizado que las casuísticas son muchas y ha puesto como ejemplo las empresas que trabajan de cara al público en espacios con gran concentración de personas (como los centros comerciales), donde se recomienda el uso de la mascarilla.

Peinado ha recordado además que la norma tiene excepciones, en el caso de la empresa privada en áreas como la sanitaria o el transporte, donde la restricción se mantiene.

El secretario general de la Creex no prevé que se produzcan grandes problemáticas en la aplicación de la norma, debido a la “experiencia” adquirida durante los dos últimos años en relación al uso de la mascarilla y a la prevención frente a la pandemia.