El presidente de APAG Extremadura ASAJA, Juan Metidieri, ha reclamado este domingo ayudas extraordinarias para las granjas de pollos ante la situación tan complicada que están atravesando por el encarecimiento de la factura energética y que puede desembocar en el cierre de muchas explotaciones.

Según ha explicado Metidieri en un comunicado, las granjas de pollos deben mantener unas condiciones y una temperatura uniforme para preservar el bienestar de las aves, por lo que la factura de luz y gas es muy elevada.

Con la subida de precios, el coste en este concepto se ha multiplicado, según el caso, por tres y por cuatro, lo que unido a otros conceptos, como los productos desinfectantes, están haciendo inviables las granjas, según ha asegurado.

Lo peor de todo, ha indicado el dirigente agrario, es que en los supermercados la carne de pollo está más cara, pero a los productores no les llega ni un céntimo de esa subida porque se la quedan los intermediarios.

A su juicio, el productor siempre es el eslabón más débil de la cadena y eso no se puede consentir.

APAG Extremadura Asaja ha planteado como soluciones dos opciones: o que la subida del precio del kilo de pollo en los lineales se repercuta al productor o que el Gobierno saque una línea de ayudas extraordinarias solo para este año, para compensar este incremento en los costes, como sí se está haciendo en otros sectores.

Metidieri ha recordado que el sector de las granjas de pollos no recibe ningún tipo de ayuda ni subvención de manera específica, como puede ser la PAC, por lo que ante una situación extraordinaria se deben tomar medidas también extraordinarias, como esa línea de ayudas.

En su opinión, si no se ofrezca una solución rápida las granjas irán a la ruina porque no podrán hacer frente a los pagos, lo que desembocará en terminar con una producción vital para España, al tratarse de un producto que se consume fresco, que no se puede importar, que es sano y que es muy asequible para los bolsillos de los consumidores.