La llegada de una lengua de polvo en suspensión procedente del desierto del Sáhara, impulsada por los vientos de la borrasca Celia, ha elevado a la categoría de «muy desfavorable» y «desfavorable» la calidad del aire en varias zona de Extremadura por los altos niveles de concentración de partículas PM10.

Según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), la invasión del polvo africano se ha reflejados en los mapas de calidad del aire.

Así, la estación de control de Monfragüe notifica que la calidad del aire es «muy desfavorable» durante esta jornada, un aviso que se torna a «desfavorable» en Cáceres y Plasencia.

De igual forma, la estación de Mérida anota una categoría de «regular», en contraposición con las de Zafra y Badajoz, en las que la calidad del aire es «razonablemente buena» y «buena», respectivamente.

Para la jornada de este miércoles, 16 de marzo, se prevé que esta situación empeore con prácticamente toda la región en «desfavorable».