La Fiscalía de Badajoz pide 15 años y ocho meses de prisión para un hombre acusado de asaltar, junto a otras dos personas, un chalé de la capital pacense, en el que retuvieron al matrimonio que se encontraba en el interior para llevarse dinero en efectivo y otros objetos.

El juicio en relación a este suceso, ocurrido en junio de 2015, que iba a celebrarse este jueves en la Audiencia de Badajoz, se ha suspendido al no poder contarse con distintas pruebas testimoniales, entre otros  motivos por la ausencia de las víctimas.

La Fiscalía ha expresado a los medios que se pide para el hombre una pena de cuatro años y ocho meses de prisión por un delito de robo con violencia, y cinco años y seis meses por sendos delitos de detención ilegal, así como una indemnización de más de 14.600 euros.

El abogado del acusado, el letrado Marco Antonio Mateos, ha explicado a su vez que el hombre no cometió estos hechos y nunca estuvo en este inmueble, y ha afirmado que “no existen pruebas” que puedan incriminarle.

Por estos hechos solo se ha podido juzgar a una persona, su cliente, quien “se encontraba en esos momentos en Madrid” pero al que se le halló tiempo después un reloj que procedería del inmueble pacense, el cual habría obtenido en una transacción que realizó en la capital española.

Según el escrito de la Fiscalía, el acusado, junto a otras dos personas, accedió a una vivienda de Badajoz gracias a una escalera para salvar el muro exterior, y con los rostros tapados por un pasamontañas sujetaron y ataron al matrimonio que se encontraba en el inmueble.

Gracias a ello se apoderaron de 8.000 euros en metálico y otros objetos -como relojes- por un valor de 6.644 euros.

El matrimonio “estuvo privado de su libertad ambulatoria por un plazo aproximado de dos horas, mientras el inculpado y sus acompañantes rebuscaban dinero en la vivienda”, expresa el escrito.

Al tiempo de marcharse encerraron a la pareja en el sótano, donde se encontraba un juego de llaves que permitió a las víctimas salir de la estancia y dar aviso a la Policía.

El juicio contará como pruebas testificales con las dos víctimas y con cuatro agentes policiales.