La población cacereña de Villanueva de la Sierra celebra este fin de semana la edición número 218 de su «Fiesta del Árbol», declarada Bien de Interés Cultural y en la que se plantarán 200 árboles autóctonos en las inmediaciones de la localidad.

De esta forma, la Fiesta del Árbol más antigua del mundo ha apostado este año por recuperar todas sus actividades, tras verse obligada en 2021 a elaborar un programa diferente con pequeños actos a consecuencia de la pandemia de la COVID-19.

Los inicios de esta fiesta se remontan al 26 de febrero de 1805, Martes de Carnaval, cuando se realizó en esta localidad cacereña una plantación de álamos en las zonas del Ejido y Fuente de la Mora, a la que fueron convocados párrocos y alcaldes.

En la plantación, realizada por alumnos de la escuela en una celebración de carácter festivo que se prolongó tres días, participaron todos los vecinos y así venía recogido en el Semanario de Agricultura y Artes en octubre de ese mismo año.

Desde entonces, y de manera casi ininterrumpida, esta localidad de la Sierra de Gata rinde homenaje al árbol con la plantación de encinas, robles, alcornoques, castaños o abedules, entre otros, sin olvidar el olivo, símbolo de paz y que forma parte de la identidad de la localidad y la comarca.

Además, estas plantaciones se han realizado en diversos emplazamientos de la localidad, lo que confiere una mayor amplitud a la celebración.

Este año se volverá a plantar 200 ejemplares procedentes de los viveros forestales de la Administración regional y se hará entrega a todos los vecinos de distintas plantas.