La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) calcula que, al ritmo de contagios existente, el 10 por ciento de los autónomos extremeños, unos 8.000, se contagiarán a lo largo de enero y febrero en Extremadura, por lo que exige que el gobierno regional ponga en marcha ayudas especiales para los autónomos que han tenido que cerrar temporalmente sus negocios ante la necesidad de tener que acogerse a una baja por enfermedad, por causa de la COVID19.

En una nota, señala que la gran mayoría de los trabajadores por cuenta propia no se acogen a la baja por enfermedad común, simplemente guardan la cuarentena, debido a los trámites necesarios para gestionar la prestación de Incapacidad Temporal y la escasa cuantía económica que perciben.

Por ello, indica que desde UPTA se siguen buscando mecanismos que minimicen las consecuencias económicas de la pandemia, que en este caso están directamente relacionadas con la salud de miles de autónomos, que ven como no les queda más remedio que echar el cierre temporal de su negocio.

Considera que el remanente de las ayudas directas que el Gobierno del Estado ha puesto en manos de las autonomías el pasado año tendría que reactivarse, son más de 2.000 millones de euros del presupuesto destinado a dichas ayudas y que no han sido aprovechados, debiendo ser devueltos por las autonomías a la administración, por lo que entiende que es necesario poner en marcha una nueva ayuda urgente que sofoque las consecuencias de esta sexta ola.

Defiende que la propuesta que hacen «es muy razonable», no sólo porque están viviendo de nuevo restricciones en sectores concretos, además de que los contagios o las bajas por ser contacto estrecho están siendo una constante.

Adelanta que en las próximas semanas se mantendrán reuniones entre las administraciones autonómicas y parte del ejecutivo estatal y espera que en este foro se adopten las medidas necesarias, ayudas que deben cumplir con el cometido de prontitud y facilidad administrativa.

Eduardo Abad, presidente de UPTA,  ha asegurado que “la mala experiencia que tenemos con los fondos COVID-19 debe hacer reflexionar a quienes tienen la capacidad de tomar decisiones, no se pueden repetir los errores que se han cometido en el 2021”.