La Policía Nacional ha detenido a diez personas, seis hombres y cuatro mujeres de entre 19 y 56 años de los que uno de ellos ha entrado en prisión provisional, por un presunto delito contra la salud pública por tráfico de drogas, lo que ha permitido desmantelar tres puntos de venta muy activos en la capital cacereña.

Nueve de las detenciones se produjeron el 17 de noviembre en cuatro registros domiciliarios, mientras que el décimo investigado fue detenido el día anterior cuando portaba 110 gramos de hachís, ha informado este lunes la Policía en nota de prensa.

Agentes del grupo de estupefacientes de la Comisaría Provincial de Cáceres han llevado a cabo desde octubre la investigación, denominada “Operación Joya”, sobre este clan familiar “completamente organizado con roles diferentes de venta y seguridad”, ha expuesto la Policía.

La operación se culminó la semana pasado con los registros en las calles Ródano, Cigüeña y Pozo de la Esmeralda, en la capital cacereña, donde se han intervenido 32,4 gramos de hachís, 18,9 gramos de marihuana, útiles para el corte de las distintas sustancias, 4.485 euros en billetes fraccionados, varios vehículos, una pistola del calibre 4,5, munición de varios calibres y terminales de telefonía móvil.

Los detenidos distribuían supuestamente sustancias estupefacientes a otros vendedores en la ciudad.

Gracias a la investigación y tras diversas vigilancias discretas, “con la dificultad que conlleva debido a las medidas de seguridad establecidas por el grupo para evitar posibles acciones policiales”, los agentes localizaron los domicilios e identificaron a los responsables.

Así, tras la preceptiva autorización judicial para llevar a cabo los registros, la Policía detuvo a los supuestos autores del tráfico de droga, decretando el juez el ingreso en la cárcel de uno de ellos.