Agentes del Seprona de la localidad cacereña de Trujillo han investigado a dos hombres que están acusados de cometer un delito de maltrato de animales domésticos.

Son dos casos distintos que se localizan en Trujillo y en Torrecillas de la Tiesa, según han informado desde la Oficina Periférica de Comunicación de la Comandancia de la Guardia Civil de Cáceres.

Uno de los investigados había colocado al cuello de un perro de raza mastín una cadena de grandes dimensiones y 2,4 kilos de peso. El objetivo de esta acción no era otro que limitar  el movimiento del animal,  mientras que en la otra actuación llevada a cabo por los agentes de la Guardia Civil  se mantuvo a un perro durante un mes con una herida grave en una de sus patas sin haber recibido asistencia o tratamiento veterinario.

La voz de alarma la dio una asociación protectora de animales de Trujillo, colectivo encargado de comunicar la existencia de un mastín que había sido recogido por la propia asociación cuando deambulaba suelto por la vía pública.

El animal no tenía microchip que permitiera su identificación y llevando atada al cuello una cadena de grandes dimensiones y 2,400 kilogramos de peso, que limitaba su movimiento. Posteriormente, el dueño del perro se presentó en  las instalaciones de esta protectora para llevarse al animal. Ante estos hechos, los agentes abrieron una investigación para tratar de esclarecer los hechos, y citaron a esta persona de 54 años de edad en dependencias del Seprona de Trujillo, donde el ahora investigado llegó a aportar la documentación relativa al microchip del perro, pero que había sido expedida el día anterior al que había sido citado por los agentes.

En cuanto al otro caso de maltrato, los agentes descubrieron  en un terreno cercado de Torrecillas de la Tiesa cinco perros, uno de los cuales presentaba una herida grave en una de sus patas que le impedía apoyarla en el suelo y en la que se observaban incluso partes internas. El animal no había recibido tratamiento veterinario.

El propietario del animal, de 48 años de edad y vecino de Torrecillas de la Tiesa, manifestó a los agentes que el perro llevaba un mes con la herida, la cual había sido provocada por la mordedura de otros perros. Estos hechos motivaron que el hombre fuera investigado como supuesto autor de un delito de maltrato de animales domésticos.

Los dos casos han sido remitidos a los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción  de Trujllo, tal y como figura en la nota remitida a los medios.