El Servicio Extremeño de Salud (SES) tiene dificultades aún para recuperar los niveles de actividad asistencial anteriores a la pandemia tras el estrés al que, tanto estructuras sanitarias como profesionales, se han visto sometidos por la COVID-19.

«Todavía nos cuesta recuperar la actividad, todavía cuesta mantener las plantillas al cien por cien, todavía cuesta mantener una actividad adecuada y similar a la de años anteriores», ha reconocido este lunes el director general de Asistencia Sanitaria del SES, Vicente Alonso Núñez.

Lo ha hecho en la Comisión de Sanidad y Servicios Sociales de la Asamblea, en la que ha comparecido, a petición del Grupo Parlamentario Ciudadanos, para informar sobre las medidas que se están tomando para reducir las listas de espera sanitarias.

En su intervención, ha explicado que las listas de espera responden a múltiples motivos, como el envejecimiento de la población, el «consumismo excesivo» por parte de pacientes en algunos casos, la limitación de recursos técnicos, el incremento de la oferta, la escasez de profesionales y la propia pandemia en los últimos tiempos.

Ha señalado que existe una «tremenda dificultad» para controlarlas dado que la tendencia «siempre» es al alza, a lo que se ha sumado la irrupción de la covid, con la consecuente prioridad de atender a la pandemia, las urgencias y las emergencias.

En este sentido, ha incidido en que «todavía está costando mucho trabajo» recuperar la actividad asistencial habitual, de modo que su balance interanual se encuentra por debajo de lo que había sido en años anteriores.

Al margen de ello, ha detallado las medidas del SES para reducir los pacientes en espera, como la implantación de la e-consulta entre profesionales, el incremento en atención primaria del acceso a pruebas y la potenciación de la cirugía menor en este nivel asistencial, intentando «cambiar el mantra de acuda usted a su especialista por el de acuda usted a su médico de familia».

La implantación de procesos asistenciales integrados, la contratación de los MIR, la creación de un equipo quirúrgico itinerante -que retomará su actividad tras el parón por la pandemia-, la mejora de los conciertos con centros ajenos y la firma de alianzas estratégicas entre servicios de diferentes áreas de salud son otras de las iniciativas mencionadas por el director general.

No obstante, ha insistido en que estas medidas no pueden garantizar una reducción de las listas de espera al cien por cien, pero sí proporcionar control y conocimiento para priorizar los procesos más graves «como elemento de equidad y cohesión social».

«Para esto es necesaria la colaboración de todos», ha subrayado Alonso, que ha pedido la ayuda de los grupos parlamentarios para tener unos tiempos acordes a las necesidades de los ciudadanos convencido de que la confrontación en este asunto solo va en perjuicio de los ciudadanos.

La diputada del Grupo Popular Elena Nevado ha aseverado que el pasado junio había 112.320 personas en lista de espera en Extremadura frente a las 50.061 de junio de 2015, a lo que ha sumado 230 plazas de médico sin cubrir y mas de 3.600 profesionales interinos.

Ha señalado que detrás de estos números, así como de las suspensiones de consultas externas -56.380 en 20202 y 2021 según ha apuntado- y de intervenciones quirúrgicas (1.975) están los «recortes» que el Gobierno regional ha llevado a cabo.

Por su parte, el diputado de Cs José María Casares ha lamentado que tras el año «horrible» de 2020, la situación no ha cambiado en los nuevos primeros meses de este año, con un incremento del 5 % de los pacientes en espera para procesos quirúrgicos, del 7 % en consultas externas y del 43 % en pruebas diagnósticas.

Por Unidas por Extremadura, el parlamentario Joaquín Macías ha criticado que las derivaciones a centros privados sigan aumentando tras la pandemia, pues es «muy mala noticia» y porque ello «va en perjuicio de la sanidad pública y en beneficio de la privada».

Para la diputada socialista María de la Cruz Buendía ha valorado el trabajo del SES para reducir las listas de espera, con una caída de casi el 39 % entre 2015 y 2019, «que no se pudo consolidar» en 2020 por la crisis sanitaria, y ha resaltado que el gasto sanitario por habitante en Extremadura se sitúa por encima de la media nacional. EFE