Los conductores de ambulancias del servicio de urgencias A1U en Cáceres realizarán sus próximas cuatro guardias durmiendo en los vehículos como protesta por el «maltrato» recibido y para acabar con los «continuos abusos» del SES respecto a servicios que no son propios de programados, altas en planta y de empresas privadas.

Más de una veintena de estos técnicos, que realizan guardias de 48 horas localizadas en sus domicilios, se han concentrado este miércoles junto al hospital San Pedro de Alcántara de la capital cacereña para denunciar públicamente su situación y advertir del próximo cambio en este servicio no asistencial.

«No soportamos más la carga de trabajo ni ver que se ha presentado un concurso nuevo, un pliego que no contempla ninguna mejora para el sistema sanitario ni menos para el servicio de urgencias», ha expuesto Rafael Garzo, del comité de empresa de COEXAM y portavoz de los conductores de urgencias.

A su juicio, estos técnicos son los únicos del sector sanitario que hacen guardias en sus casas con un tiempo de activación de cinco minutos, «sin mucho margen de acción y a entera disposición de la empresa durante 48 horas», ha dicho Garzo, quien ha pedido no realizar las guardias en las casas particulares.

En este sentido ha denunciado que mientras el convenio dice que su carga de trabajo son 1.800 horas anuales, ellos hacen 3.960 horas, algo en su opinión, «injustificable».

En total son unos 180 trabajadores afectados, dos por ambulancia, que en el nuevo concurso aumentan a 95 las de urgencias «cargando» a estos con el soporte vital básico porque «quieren quitarlo de algunas zonas», ha señalado Garzo.

«Nos quieren reconvertir en soporte básico y hay que decirle al señor Vergeles que los coches A1U no son asistenciales, lo dice un real decreto, que hay que cumplirlo», ha recalcado.

Así, ha explicado que el equipamiento y las características de estas ambulancias no son las adecuadas para ser asistenciales y cumplir la labor de los SVB.

En un comunicado, el comité de empresa de COEXAM ha mostrado su apoyo a los técnicos de este servicio, y ha explicado que sus vehículos no cuentan con las prestaciones para poder dar asistencia en ruta al paciente.

«Su finalidad en el servicio de urgencias debería de ser únicamente el traslado de pacientes en camilla tal y como dice el RD 836/2012 y no avisos del 112 de cualquier índole (cuando el resto de unidades están ocupadas) o urgencias que requieren la intervención de varios técnicos», ha explicado.

En su opinión, este servicio está «totalmente obsoleto» y se debería realizar en bases y de forma presencial, y no en sus propias casas.

Así, ha pedido evolucionar el servicio de urgencias y emergencias en la región, ampliando la red de ambulancias de soporte vital básico para poder priorizar su utilización para estos servicios, con un aumento de la calidad asistencial, tal y como se hace en otras comunidades. EFE