El vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, ha advertido este viernes de que en la mayoría de los brotes están involucradas «personas en edad pediátrica», por lo que ha hecho un llamamiento a la responsabilidad para proteger a esta parte de la población que aún no está vacunada.

Vergeles ha hecho estas declaraciones, a pregunta de los medios, en una rueda de prensa en la que ha presentado el Manual de Intervención Social Online para Personas Mayores.

Ante el primer puente de la nueva normalidad, ha pedido que se cumplan las mínimas restricciones que hay y ha emplazado a pensar en los pequeños que están aún sin vacunar.

A su juicio, los niños han dado una «lección a los adultos» porque se acostumbraron rápidamente a la mascarilla y a la distancia social.

Vergeles no cree que haya una vacuna para ellos antes de final de año, ya que las empresas deben aportar los ensayos clínicos suficientes para comprobar que es segura a esa edad antes de tomar una decisión y el procedimiento en la Unión Europea es «más garantista» que en EEUU.

Por otro lado, ha señalado que comparte el planteamiento del presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, de que la información del coronavirus se comience a comunicar de forma semanal y todos los días, aunque aún no lo han planteado al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.

Vergeles lo ha justificado en la continua bajada de la incidencia y en que cada vez hay menos casos graves.

De hecho, esta jornada volverá a descender el número de personas ingresadas, según ha anunciado el consejero, que ha abogado por informar de forma semanal como ocurre con la gripe.

A su juicio, debe haber ya una «desescalada» en la comunicación para que la «sobreinformación» no retraiga el desarrollo social y económico que se tiene que dar en las circunstancias actuales, aunque ha asegurado que siempre se actuará con «toda la transparencia del mundo».

Según Vergeles, han sido mucho meses pendientes a diario de un dato y la gente tiene que descansar.

Se trata de prevenir, ha precisado, que el nivel de preocupación de los ciudadanos esté por encima de la realidad de la pandemia.

Extremadura se plantea el cambio informativo, además, porque la semana que viene se cumplirán 14 días, el periodo de incubación de la enfermedad, desde las flexibilización de las restricciones y la medida «no ha tenido repercusión» en la incidencia de la enfermedad.

El consejero ha considerado que cuanto más avanza el tiempo, con menos incidencia y la enfermedad grave está «muy controlada», la posibilidad de una nueva ola «es cada vez es más difícil».