La Guardia Civil ha detenido, mediante el despliegue de un importante dispositivo con una treintena de agentes, a un peligroso delincuente que, junto a un familiar, se mantenía oculto en una finca de Zarza Capilla (Badajoz), donde había instaladas cámaras de seguridad y trampas con barreras punzantes.

Al detenido, vecino de la localidad pacense de Valdecaballeros, le constaba una orden de búsqueda, detención e ingreso en prisión, según informa la Comandancia de la Guardia Civil de Badajoz en nota de prensa.

Ante el ordenamiento del Juzgado de lo Penal número 3 de Talavera la Reina que pesaba sobre este hombre, con numerosos antecedentes penales y policiales, la Guardia Civil estableció dispositivos de búsqueda y localización en torno a su municipio de residencia.

Esta persona, a sabiendas del mandamiento judicial, huyó de su domicilio, adentrándose y ocultándose en diferentes parajes de la comarca de La Serena que conocía perfectamente.

Después de tres meses de investigación, los agentes descubrieron que se ocultaba en una finca abrupta y de difícil acceso de Zarza Capilla, la cual contaba con cámaras de seguridad y trampas con barreras punzantes, que supuestamente habría instalado esta persona con el fin de dificultar su detención.

En coordinación con el Juzgado de Instrucción número 2 de Castuera, se estableció este pasado viernes un amplio dispositivo con una treintena de agentes y tras acceder al interior de la propiedad, lo hallaron oculto en una casa de campo, acompañado de un familiar, también reclamado judicialmente.

Identificados ambos detenidos, el de Valdecaballeros, en cumplimiento de la orden judicial, ingresó en el Centro Penitenciario de la capital pacense.

La Guardia Civil investiga ahora su presunta implicación en otras acciones delictivas que pudiera haber cometido en los últimos meses. EFE