La defensa de la mujer acusada por la Fiscalía de Badajoz de obligar a una joven a ejercer la prostitución en enero de 2018 en la capital pacense, por lo cual se solicitan once años de cárcel, ha pedido su absolución a tenor de que el juicio por esta causa en la Audiencia pacense «demuestra que los hechos por los cuales se le acusa no son ciertos».

El abogado de la acusada, Enrique González de Vallejo, ha explicado a Efe que la propia víctima ha reconocido que viajó de forma voluntaria de Colombia a España y que nunca fue obligada a ejercer la prostitución en Badajoz, lo que dejó de realizar al querer volver a su país natal.

Además, ha añadido, ya en 2018 explicó en su país que “todo fue voluntario”, poco tiempo después de que denunciase en España que había sido obligada a ejercer la prostitución.

El juicio se inició ayer, este miércoles ha contado con la declaración de agentes policiales, y se podría alargar hasta el próximo lunes.

La Audiencia de Badajoz juzga estos hechos según los cuales, como explica el escrito de la Fiscalía, la acusada M. S. se habría ganado la confianza de la víctima T.P. en Barranquilla (Colombia) con promesas sobre un trabajo en España, para convencerla así para que viajasen juntas al país, facilitándose incluso más de mil euros.

A su vez le proporcionó ropa y joyas y le indicó cómo actuar en los controles aduaneros para aparentar ser turista.

Siempre bajo el control de M.S., ambas mujeres se desplazaron a Badajoz, a un piso del Casco Antiguo donde la acusada le indicó a la víctima que para devolverle la deuda debía ejercer la prostitución, indica la Fiscalía.

“La acusada era quien controlaba las llamadas de los clientes, las citas, las tarifas y los pagos, -se expresa- y decidía qué servicios sexuales debía prestar la víctima, quedándose directamente con la mitad de esas cantidades, y así mismo con la otra mitad so pretexto del pago de la deuda contraída y de la manutención en la vivienda”.

T. P., que no percibió cantidad alguna, aprovechó un descuido de la acusada para abandonar de forma precipitada el piso, y merced al dinero que un cliente le había facilitado viajó en autobús hasta Madrid, donde denunció los hechos, explica la Fiscalía. EFE