El consejero de Sanidad de la Junta de Extremadura, José María Vergeles, ha reconocido que hay “preocupación por las residencias de mayores” ya que en 16 hay brotes que engloban a 188 residentes positivos y 55 trabajadores con Covid-19.

Además, los datos oficiales indican que han fallecido 36 residentes durante esta quinta ola.  A pesar de estas cifras y del fallecimiento este miércoles de 6 personas y de sumar la región en 24 horas 220 nuevos contagios, la situación epidemiológica de Extremadura “es de tendencia a la disminución de la incidencia acumulada (IA) a los 14 y a los siete días” y va “bajando en todos los tramos de edad”, como demuestra la razón de tasa que se encuentra en 0,38.

Así la IA a los 14 días se sitúa en los 443 casos por 100.000 habitantes y en 169 a los siete pero está “más alta que la media española”, una situación que el responsable de Sanidad achaca a que Extremadura empezó más tarde la quinta ola y a que en la región se hace el doble de pruebas de diagnóstico (3.000 por 100.000 habitantes) lo que permite que alrededor del 90 por ciento de los diagnosticados sean asintomáticos. En la actualidad la positividad de las pruebas se sitúa en el 5,4 por ciento, ha indicado Vergeles.

Según el consejero, esto ha permitido mantener la presión hospitalaria durante la quinta ola y se ha mantenido una actividad no covid adecuada, “salvo en momentos puntuales” en el Hospital de Plasencia y en el Hospital Universitario de Cáceres.