Dos religiosos de la Archidiócesis de Mérida-Badajoz han fallecido por coronavirus desde el inicio de la pandemia, según ha informado el Arzobispado de Madrid, que ha contabilizado numerosos contagiados y fallecidos por coronavirus.

El 11 de marzo de 2020 falleció en Madrid el diácono permanente José María Venturo García, a los 74 años de edad. Natural de Palomero (Cáceres), fue ordenado diácono permanente el 30 de abril de 2005 en Madrid. Ejerció el ministerio diaconal en Santa María del Pozo y Santa Marta (2005-2008); San Pedro Advíncula (2008-2015); Santa Eulalia de Mérida (2015-2019) y, desde 2019, de nuevo en Santa María del Pozo y Santa Marta. José María estaba casado con Aurora y eran padres de tres hijos y nietos. Recibió sepultura el día 12 de marzo en el Cementerio Municipal de Vallecas.

El otro religioso extremeño fallecido es Julio González Delgado, que falleció el 21 de marzo de 2020 en Madrid a los 80 años. El sacerdote nació en Mérida (Badajoz) el 16 de noviembre de 1939. Fue ordenado sacerdote en Madrid el 29 de junio de 1966, fue párroco de Camarma de Esteruelas (1966-1975) y, desde 1975 hasta su jubilación canónica en 2016, fue párroco de Santa María la Blanca de Canillejas, en Madrid. En el momento de su fallecimiento era adscrito en la parroquia de Santa Adela.