La nueva Comunidad Terapéutica ‘Charo Cordero’ ha abierto una nueva etapa en  Finca Capote de Plasencia para prestar servicio a mujeres que, acompañadas de sus hijos, reciben ayuda para superar sus conductas adictivas.

Este es el primer centro de estas características con el que cuenta la provincia de Cáceres. Se trata de un recurso público y gratuito para mujeres con conductas adictivas, gestionado por Cruz Roja.

Desde 2005, Finca Capote se atendía a personas con problemas de adicción, pero gracias a una aportación de 6.000 euros realizada por la Diputación de Cáceres se han  ampliado las instalaciones para poder ofrecer una atención específica a mujeres.

La medida pretende que las mujeres con sus hijos puedan acceder al programa de tratamiento y reinserción madres sin tener que separarse de sus hijos, ya que se cuenta con espacio para ambos.

El centro se ha presentado oficialmente en este lunes en un acto en el han acudido el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, y  el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles; y el presidente de la Diputación de Cáceres, Carlos Carlos Rodríguez, entre otros.