Durante los primeros meses de 2020 la Covid-19 se metió en nuestras vidas sin avisar y causó estragos en todas las áreas de salud de Extremadura, aunque hubo una notable diferencia de unas a otras. Hasta el 21 de junio, fecha en la que se dio por finalizada oficialmente la primera ola y los ciudadanos alcanzamos la mal llamada nueva normalidad, el coronavirus dejó unas cifras demoledoras sobre la mesa: 519 fallecidos en la comunidad autónoma de los que más de la mitad, 271, se registraron en el área de salud de Cáceres.

En aquellas fechas llamó la atención de epidemiólogos y responsables de salud de toda España la elevada cifra de contagios de la capital cacereña y su área de influencia, que llegó a tener la tasa de letalidad más elevada de todo el país. Por el contrario, otras zonas, como la de Llerena-Zafra, hicieron frente a la pandemia logrando unas cifras realmente buenas comparadas con lo que estaba sucediendo; en este área de salud perdieron la vida como consecuencia del coronavirus 6 personas hasta el 21 de junio. Las otras áreas con los mejores resultados en la región fueron las de Coria y Don Benito-Villanueva de la Serena, con 21 fallecidos cada una.

Tras la célebre frase «hemos vencido al virus», pronunciada a las puertas del verano por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y finalizado el paréntesis vacacional, Extremadura dejó atrás la nueva normalidad y recuperó la vieja realidad. A partir de entonces la propagación de la pandemia cambió de rumbo y de localización, provocando situaciones inesperadas; pero de todas ellas, la más preocupante es la del área de salud de Don Benito-Villanueva de la Serena.

Los últimos datos oficiales difundidos por la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales este miércoles arrojan un resultado digno de análisis en esta zona: se han notificado 23 nuevos casos positivos, hay 29 pacientes hospitalizados, 2 de ellos están en cuidados intensivos y, lo peor de todo, los cuatro fallecidos de la jornada pertenecen a este área de salud. La zona de las Vegas Altas del Guadiana ha pasado de ser una de las que mejores cifras logró frente a la pandemia en la primera ola a situarse entre las que acumulan la cifra más elevada de fallecidos, con 228 víctimas mortales. Los datos oficiales revelan que hasta el verano fallecieron 21 personas y desde entonces han muerto como consecuencia de esta enfermedad 207.

La situación en Don Benito-Villanueva de la Serena sólo es comparable a la de las grandes ciudades de Extremadura. El área de salud de Cáceres ha registrado 466 fallecidos desde el inicio de la crisis sanitaria, el de Badajoz 310 y el de Mérida 233. De continuar con la misma tendencia, la zona de las Vegas Altas se situará muy pronto entre las tres áreas de salud con la mayor cifra de fallecidos de la región. Aunque no se han facilitado datos sobre el número total de contagiados segmentados por áreas sanitarias, basta con tener en cuenta un dato: en Don Benito-Villanueva de la Serena se han dado 9.209 altas, un dato significativo que puede compararse con las 12.627 de Cáceresm las 12.466 de Mérida o las 20.070 de Badajoz.

Lo sucedido en este área de salud sólo es equiparable a lo ocurrido en la zona de Llerena-Zafra: ha pasado de ser la que mejor afrontó la pandemia en la primera ola, con sólo 6 fallecidos hasta el 21 de junio, a incrementar de forma alarmante el número de víctimas mortales por coronavirus desde aquella fecha. En Llerena-Zafra han perdido la vida hasta el momento 120 personas.