El Ayuntamiento de Cáceres y la Fundación Triángulo han puesto en marcha la campaña ‘Cáceres, Patrimonio de la Diversidad’, que se desarrollará durante el próximo mes con el objetivo de empoderar y visibilizar especialmente a los ciudadanos LGBTI.

El concejal de Igualdad LGBTI, David Holguín, ha destacado que además sirve para lanzar un mensaje más allá de las propias fronteras ciudad, “y aunque ahora no pueden visitarnos muchas personas, lanzar el mensaje de que Cáceres es una ciudad acogedora, diversa y necesita que las personas sean felices y luchemos todos juntos contra el odio”.

El edil  ha defendido  «yn Cáceres que sea integrador, diverso y que potencie a las personas como primera forma a la hora de llegar a sus políticas, porque las personas somos el origen y el engranaje que mueve toda la sociedad”, ha añadido.

Una campaña que busca potenciar en sí mismo lo positivo de la diversidad “y Cáceres necesita que este título de Patrimonio de la Humanidad se complete con el de la Diversidad, que al final todas las personas de este colectivo puedan integrarse dentro de la ciudad y de su forma de vida”.

El concejal del área  ha agradecido el trabajo que ha desarrollado la Fundación Triángulo estos años, “especialmente por aquella relación que surge con el ayuntamiento desde que ocupo esta concejalía”.

Además, el edil cacereño ha ensalzado “el trabajo tan intenso que han realizado en un trabajo sobre las personas LGBTI migrantes en Cáceres, porque han sido de las pocas organizaciones que se han ocupado de este colectivo, han conseguido crear un grupo de apoyo entre ellos para no dejar a nadie atrás, ha sido un acompañamiento y un trabajo muy positivo”.

En la campaña, ha indicado Hugo Alonso, secretario de la Fundación Triángulo, “han participado personas de este colectivo, y se desarrollará en soportes de vídeo, papel, cartelería y redes sociales. Queremos no sea solamente una campaña sino una filosofía de vida y que perviva en el tiempo y en los corazones de las personas que vivimos en esta ciudad”.

Por lo que se refiere al estudio, la presidenta de la Fundación, Silvia Tostado, ha destacado que, al ser preguntadas por los motivos que les hicieron venir a vivir a España, el 94% de las personas encuestadas afirmó que sus motivos tenían que ver de una forma u otra con la violencia hacia las personas del colectivo LGBTI que vivían en sus países de origen.

“Y se sienten seguros en la ciudad, pero han sufrido discriminación en el acceso a la vivienda y el empleo, pero no por su orientación sexual o su identidad de género sino por la xenofobia por su procedencia o su color de piel”, ha concluido.