Las organizaciones agrarias Asaja Extremadura y UPA-UCE Extremadura y Cooperativas de Extremadura, ha trasladado a la Delegación del Gobierno en la región su intención de celebrar cuatro tractoradas en el próximo mes con las que pretenden exigir al Gobierno que aclare la «incertidumbre» que atraviesa el sector del tabaco.

Un sector que se encuentra «en serio riesgo» de quedar excluido de las ayudas del nuevo periodo de la PAC, señalan los convocantes de estas movilizaciones, con las que pretenden cortar el tráfico en la autovía A-5, a la altura de Navalmoral de la Mata, los próximos días 19 y 26 de febrero, y 5 y 12 de marzo.

Se trata de concentraciones que ya estaban previstas para el mes de enero pero que quedaron aplazadas por la incidencia del coronavirus en la comunidad extremeña.

Una vez que se han comenzado a levantar las restricciones, y respetando siempre las indicaciones de Salud Pública, los productores de tabaco esperan volver a concentrarse en el kilómetro 174 de la A-5, junto al área de servicio Los Cerrillos, en Navalmoral de la Mata.

Se trata de un punto simbólico para las reivindicaciones de los agricultores extremeños, pues fue el lugar elegido el año pasado para llevar a toda España sus reivindicaciones, paralizando la circulación durante más de seis horas.

Unas tractoradas que regresan después de que el ministro de Agricultura, Luis Planas, se haya «negado», afirman estas organizaciones, a recibir a los productores tabaqueros extremeños, y de que el encuentro con el secretario general de Agricultura, Fernando Miranda, el pasado 3 de febrero, «no haya despejado, sino al contrario, la incertidumbre» que el Gobierno «sigue sembrando» en las más de 4.000 familias que viven del tabaco.

Familias que ven «amenazada» la continuidad de sus explotaciones sin que se cierre la inclusión del tabaco en el Plan Estratégico Nacional de la futura PAC (hasta 2027), con unas pérdidas que podrían rondar el 50% de las actuales ayudas, que se traduce en 14 millones de euros.

Cabe recordar que las movilizaciones ya comenzaron el pasado 16 de noviembre con la paralización de la entrada de tabaco a las industrias del sector y en defensa del trascendental papel que tiene este cultivo en Extremadura, sobre todo el norte de Cáceres, donde se realiza el 97% de la producción nacional.

Posteriormente, los representantes del sector se han reunido con los grupos parlamentarios en la Asamblea de Extremadura, los alcaldes de las zonas afectadas y los agentes sociales de la región buscando un respaldo que no se ha conseguido, al menos de momento, por parte del Gobierno de España.