El Sindicato de Enfermería, SATSE, ha reclamado a la consejería de Sanidad que aceleren la vacunación de enfermeros, fisioterapeutas y el conjunto del personal sanitario ante la situación de extrema gravedad que se prevé que sufran los centros sanitarios y sociosanitarios por el progresivo aumento de las personas afectadas por el coronavirus.

SATSE ha advertido que “la cada vez más preocupante evolución de los contagios por Covid-19 en Extremadura llevará a tener en escasos días un escenario de gran sobrecarga y tensión en el conjunto de los centros sanitarios y sociosanitarios del país ante el que resulta absolutamente necesario contar con el mayor número posible de profesionales sanitarios”.

Por ello, apunta el sindicato que resulta imprescindible que los profesionales sanitarios se encuentren inmunizados tras recibir las correspondientes dosis de la vacuna del Covid-19 y puedan atender y cuidar a todas las personas afectadas por esta enfermedad.

“La protección de nuestros profesionales sanitarios debe ser ahora una prioridad de la administración pública competente, ya que permitirá paliar los efectos de la tercera ola del coronavirus sobre el propio sistema sanitario. No podemos permitir que ningún sanitario contraiga la enfermedad por falta de diligencia de la administración a la hora de vacunarles con urgencia y, con ello, no puedan garantizar la continuidad en la atención y cuidados necesarios a los pacientes y ciudadanos”.

SATSE insiste en que la consejería de Sanidad debe optimizar y agilizar sus estrategias de vacunación para que la totalidad de su personal sanitario haya sido vacunado lo más pronto posible y añade que, teniendo en cuenta que la vacunación de este colectivo resulta más fácil a nivel logístico y organizativo, no hay argumento o excusa que valga para que no se complete en próximas fechas.

“La tercera ola del coronavirus es ya una dramática realidad que golpeará con especial gravedad y virulencia a los centros sanitarios del conjunto del SES y hay que posibilitar prioritariamente la vacunación de los profesionales que volverán a afrontar situaciones muy duras y difíciles ante las que deben estar en las mejores condiciones para hacerlo”.

El Sindicato de Enfermería recuerda que toda baja de un profesional sanitario motivada por haber contraído la enfermedad supone, además de un grave perjuicio y riesgo severo para su salud, una mayor sobrecarga laboral para sus compañeros y una peor atención y cuidados a los pacientes.

SATSE reitera que los enfermeros, fisioterapeutas y el conjunto del personal sanitario se encuentran exhaustos después de diez meses de trabajo en los que los sucesivos rebrotes de la pandemia no les han dado tregua alguna impidiéndoles descansar. “Debemos aprender de los errores del pasado y tenemos que proteger mejor a las personas que se dedican con todo su empeño, esfuerzo y compromiso a atender y cuidar a los demás”, concluye.