La segunda oleada del virus se ha expandido con facilidad entre los pueblos de Sierra de Gata y Valle del Alagón. Es el caso de Casillas de Coria que tiene actualmente trece positivos confirmados por prueba PCR, pero son numerosos los contactos estrechos.

“Estamos medio pueblo confinados en nuestras casas”, ha apuntado Felipe Amores, primer edil de la localidad que ha subrayado que “la situación es mala y se vive con miedo”.

Ante el incremento de contagios en la localidad, desde el consistorio se ha suspendido el mercadillo semanal y se está procediendo a desinfectar calles y contenedores con el objetivo de reducir la carga viral.

Asimismo, el alcalde ha hecho hincapié en la importancia del uso de la mascarilla, la utilización del gel hidroalcoholico y la distancia de seguridad así como respetar aforos.