Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Destacamento de Tráfico de Plasencia (Cáceres), sorprendieron en la madrugada del pasado día 25 de diciembre a un conductor que circulaba incumpliendo las limitaciones de movilidad nocturna establecidas por la autoridad para contener la propagación de infecciones causadas por el virus Covid-19, a quien, además, le fueron intervenidas distintas dosis de drogas como speed, marihuana y hachís, y dio positivo, a cuatro tipos distintos de sustancias estupefacientes, en el test de drogas que le fue realizado.

La actuación tuvo lugar el pasado día 25 de diciembre, con motivo del Plan de vigilancia y control sobre alcoholemia y drogas, así como de verificación del cumplimiento de las limitaciones de movilidad nocturna establecidas para evitar la propagación de infecciones causadas por el virus Covid-19.

Concretamente, fueron agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Destacamento de Tráfico de Plasencia (Cáceres), quienes interceptaron un vehículo en la carretera EX-370 (Plasencia a Pozuelo de Zarzón), que circulaba fuera del horario establecido por la autoridad competente para realizar desplazamientos por las vías públicas.

Tras identificar al conductor, un vecino de Plasencia (Cáceres) de 24 años de edad, los agentes comprobaron que circulaba fuera de cualquier supuesto de excepción que justificara su movimiento, observando, además, que pudiera conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas.

Por este motivo se le realizó el correspondiente test de detección de drogas, en el que dio positivo a cuatro tipos de sustancias estupefacientes; cocaína, metanfetamina, THC (tetrahidrocannabinol, principal constituyente psicoactivo del cannabis) y anfetamina. Del mismo modo, tras realizar un registro superficial del vehículo, los agentes hallaron varias dosis de distintas drogas como speed, marihuana y hachís.

Por todo ello, la Guardia Civil denunció al conductor como supuesto autor de varias infracciones; a Ley de Seguridad Vial, por conducir con presencia de drogas en su organismo, a la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana, por tenencia ilícita de drogas y a la Ley de Salud Pública de Extremadura, por  el incumplimiento de las medidas establecidas como consecuencia de la situación sanitaria ocasionada por la Covid-19.

Desde la Guardia Civil se recuerda que conducir con presencia de drogas en el organismo puede afectar a las capacidades psicofísicas de los conductores y por tanto conlleva un peligro para la seguridad del tráfico, además de una multa de 1.000 euros y la detracción de seis puntos en el permiso de conducir, por infracción muy grave.