El empresario Antonio Méndez, dueño del bar Méndez, situado en el barrio de San Roque de Badajoz vivió este lunes una jornada que no olvidará. Durante la primera hora de la mañana, mientras trabajaba como cada día en su local, un hombre entró y le pidió un café. La situación no continuó con normalidad tras esta petición.

“Cuando me pidió un café con leche, me giré y me puso una navaja en la nuca”, ha apuntado Méndez quien ha indicado que lo único en lo que pensó fue en sus hijos.

El ladrón le pidió el dinero que tenía para pagar a los proveedores durante esta semana. En total, el botín fue de 300 euros algo que ha provocado problemas económicos en este establecimiento pacense.

“Si la situación ya era difícil con la pandemia, ahora lo es más. Mis clientes no pueden acercarse a la barra, cuando somos un establecimiento que utiliza la barra a cada momento. Ya venía tocado de la pandemia y ahora, en unos minutos, me quitan los 300 euros que iba a emplear para pagar a mis proveedores”, ha apuntado Antonio.

Este bar es una herencia de su padre, un establecimiento que lleva 50 años atendiendo a la clientela que decide disfrutar de una tertulia en la barra del bar.

La Policía Nacional trabaja actualmente en la búsqueda de la persona o personas implicadas en este robo.