La organización agraria UPA-UCE Extremadura estima que se ha perdido un 40 por ciento de la producción de cereza por la lluvia y el granizo registrados en los últimos meses en las zonas productoras del norte de Cáceres, y reclama medidas para los agricultores afectados.

Tras alertar de que la campaña de cereza está "paralizada" por dichas circunstancias, ha indicado que las variedades tempranas, que representan en torno al 20 por ciento de la producción, han quedado "completamente arrasadas" por las intensas lluvias.

Por su parte, las variedades medias-tempranas, que representan un 25 por ciento del total, presentan daños entre el 50 y 80 por ciento de su producción, añade.

UPA-UCE Extremadura destaca que, actualmente, tan soólo se está entregando en torno a un 3 por ciento de la producción con respecto a una campaña normal. "Las tormentas han dejado daños irreparables en los municipios más castigados por las intensas y constantes lluvias", señala el secretario general de UPA-UCE Extremadura, Ignacio Huertas, que avanza que la organización agraria reclamará a las administraciones un paquete de medidas para los agricultores cereceros afectados.

"Debería haber recogido ya unos 2.500 kilos de cerezas diarias y no he ido ni un solo día a recolectar en esta campaña", mantiene uno de los productores.

En este sentido, UPA-UCE Extremadura incide en que el cultivo de la cereza es "fundamental" en estas zonas tanto desde el punto de vista social, por el empleo que genera y porque se trata de explotaciones familiares, y también desde el punto de vista económico porque supone "el principal sustento de la zona".

Esta organización agraria mantiene que se están entregando en torno a 4.000 kilos diarios a diferencia de los 200.000 kilos en una campaña normal. "De los 40 millones de kilos que componen la producción total, nos quedan unos 18 por recoger como consecuencia de todos los daños que hemos sufrido en nuestras explotaciones", apunta Huertas.