RAQUEL DE LA ROSA – PLASENCIA

El coronavirus ha dejado historias heroicas entre la población. Relatos cargados de emoción, de superación y de ganas de continuar luchando para frenar este virus que se extiende a la velocidad de la luz. Edílfer Urdaneta, es venezolano, residente en Plasencia y uno de los casos de coronavirus en la ciudad placentina.

“Desperté con fiebre, dolor de cabeza e insuficiencia respiratoria”, ha recordado Urdaneta. Acto seguido se puso en contacto con su médico de cabecera y, poco después, fue trasladado al Hospital Virgen del Puerto. Este joven ingresó en la quinta planta del centro sanitario donde estuvo una semana.

“Se te vuelve el mundo pequeño, no sabes qué va a ocurrir”, ha subrayado Urdaneta emocionado. Le costaba respirar y solamente sentía dolor, pero también ha asegurado, como otros pacientes, el lado psicológico de esta enfermedad. “Estas solo entre cuatro paredes, sientes la soledad más absoluta”, ha dicho.

También ha subrayado el miedo que produce la enfermedad porque “no sabes cómo va a reaccionar tu cuerpo”. No ha olvidado que una de las fuerzas vitales para superar cualquier mal es el amor ya que sintió el cariño y el apoyo incondicional de su mujer y su hija a través de las cuatro paredes de su habitación.

“Mucha gente se queja porque está encerrada en su casa aburrida, pero no se acuerdan de los que tenemos coronavirus y estamos encerrados en una habitación”, ha dicho a modo de crear conciencia social.

Además, ha asegurado que este virus le ha servido para aprender a valorar las pequeñas cosas de la vida y ha sacado su lado más humano, “ahora soy más sensible”, ha dicho.

A pesar de todas las historias que se cuentan con respecto a este coronavirus son muchas las personas que no respetan el Estado de Alarma. Actualmente en Extremadura hay más de 12.000 denuncias por no respetar el confinamiento. “No somos héroes, el Covid-19 le puede llegar a cualquiera”, ha concluido.