Los 12 trabajadores de la Residencia San Blas de Moraleja se han aislado junto a los 36 usuarios para evitar posible contagios por Covid-19, en un centro en el que hasta la fecha no se ha registrado casos ni hay mayores con síntomas que pudieran ser compatibles con el virus.

Los empleados han tomado esta decisión de forma unánime y quieren evitar que llegue posible carga viral desde la calle al geriátrico y pueda producir contagios.

Los trabajadores se han dividido en grupos de seis, así han hecho dos grupos que se turnarán cada 15 días.

Los vecinos de Moraleja han aplaudido la iniciativa y dan ánimo a los empleados y a sus familias ante la complicada situación que tendrán que vivir sin estar durante 15 días sin convivir con sus seres queridos.