Los incendios activos desde este fin de semana en varias zonas del centro de Portugal hacen que Extremadura dirija sus miradas al país vecino por el riesgo de elevadas temperaturas, la velocidad del viento y el temor a que el fuego pudiera acercarse a esta comunidad autónoma.
Nueve municipios en los distritos de Castelo Branco, Santarém, Guarda, Portalegre y Faro mantienen el riesgo máximo de incendio, según el Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera (IPMA). En el distrito de Castelo Branco, el más próximo a Extremadura, se han producido incendios desde el sábado por la tarde que se saldaron con ocho heridos de diversa consideración.
Este incendio es el que presenta el mayor número de municipios con riesgo máximo de incendio: Vila Velha de Ródão, Proença-a-Nova, Penamacor y Covilhã. En situación de máxima alerta de incendio se encuentran también los municipios de Sabugal, Guarda, Nisa y Marvão, municipio muy próximo a Valencia de Alcántara. El máximo riesgo se extiende asimismo a Portalegre, Alcoutim, Faro y Mação, en Santarém, y a varios municipios en los distritos de Bragança, Viseu, Guarda, Castelo Branco, Santarém, Beja y Faro.
Las elevadas temperaturas y el viento hicieron sonar la alerta y sucedió lo que se temía: los grandes incendios regresaron a la Beira Interior. Varios bomberos resultaron heridos, uno de ellos en estado grave, en la lucha contra las llamas, que se podían divisar durante la noche desde distintos puntos de Extremadura, como los puntos más elevados de la comarca de Sierra de Gata.
Durante el fin de semana, varios incendios forestales continuaban activos en el distrito de Castelo Branco, en el municipio de Sertã y Vila de Rei y se habían desplazado 387 operativos, 109 vehículos y 15 medios aéreos.
El asunto era especialmente complejo porque se registraron varios incendios dentro de la misma región geográfica, incendios que, además de los efectos meteorológicos esperados, están creando sus propios efectos meteorológicos porque se están integrando entre sí.
Los incendios en el distrito de Castelo Branco obligaron al corte de la carretera Nacional-2 en la zona entre Vila de Rei y Cernadas, la Nacional 244, en el área de São João de Peso, y la Municipal 160, en la zona de Várzea. Por el momento, ninguno de estos municipios se encuentra próximo a Extremadura, aunque ha sido necesario estrechar la vigilancia y estar muy pendientes de la evolución de las llamas en previsión de que las condiciones climatológicas adversas contribuyesen a propagar las llamas.
