ISABEL BARRANTES 

 

Los Patas Blancas de Victorino Martín han ofrecido al público el encierro más largo de las fiestas de San Buenaventura de este año, el cual ha durado cerca de treinta minutos debido a la resistencia que ha opuesto uno de los novillos para entrar en los chiqueros.

A pesar de las altas temperaturas ha sido numeroso el público que se ha agolpado en las vallas del recorrido y en la plaza de toros para seguir este emocionante encierro con unos astados que no han defraudado y que ya desde su desembarque en los corrales de la calle Goya, donde ya daban problemas, han hecho gala de su carácter. 

El encierro ha comenzado encabezado por los cuatro mansos en solitarios, motivo por el que los pastores se han encargado de reconducirlos hasta los corrales para ayudar a los cuatro novillos a continuar por el recorrido.

A partir de este momento el encierro ha continuado con una manada digregada. El primero en llegar a la plaza de toros ha sido un grupo formado por los cuatro mansos y dos novillos. A pocos metros de estos se situaba un novillo en solitario, mientras que el cuarto se ha quedado rezagado.

Con este motivo ha sido necesaria la ayuda de uno de los pastores y del propio ganadero Victorino Martín para reconducirlo hasta la plaza de toros.

Una vez todos los novillos en el albero dos de los novillos han entrado en chiqueros arropados por los mansos. Un tercer novillo ha entrado atendiendo a las llamadas que le hacían los pastores, mientras que un cuarto toro ha permanecido en coso más de veinticinco minutos.

Este novillo hacía caso omiso a los mansos que intentaban reconducirlo al interior de la casa toril. Tras varios intentos en los que los pastores citaban al toro con capotes y trapos éste atendía a las llamadas y se introducía en el pasillo que conduce a los corrales, pero haciendo gala de su bravura no ha permitido a los operarios cerrar las puertas.

Finalmente y tras varias embestidas contra las talanqueras, el toro ha entrado en los chiqueros con la ayuda de una soga, dando así por finalizado el encierro más largo de estas fiestas.

Cabe destacar que a pesar de la intensidad del encierro no ha habido que lamentar ningún herido por asta de toro. Los servicios médicos tan sólo han atendido al ganadero Victorino Martín que acudía a la enfermería con un pequeño golpe de calor y con una contusión en la pierna por el golpe propinado por un manso pero que no revestía mayor gravedad, según ha informado el coordinador médico, Ricardo Iglesias.