ISABEL BARRANTES 

 

La consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, Begoña García, ha recibido el diploma que certifica la calidad en la categoría de Espacios Naturales Protegidos otorgado al Parque Nacional de Monfragüe por parte del Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE).

El acto se ha celebrado en el Palacio de Cibeles de Madrid en el marco de la Feria Internacional de Turismo (FITUR) y al mismo han asistido también los directores generales de Medio Ambiente, Pedro Muñoz, de Turismo, Francisco Martín, y de Desarrollo Rural, Manuel Mejías.

La certificación concedida tiene validez para el periodo comprendido entre el 28 de noviembre de 2016 y el 27 de noviembre de 2019 y estará sujeta a sus procesos de auditorías anuales. De esta manera, el parque extremeño es, junto al de Aigüestortes, es el único a nivel nacional que cuenta con dicha certificación.

La Q de Calidad Turística es una certificación expedida por el Instituto para la Calidad Turística Española, única en el sector turístico español. Se trata de una herramienta que permite al espacio protegido contar con técnicas y herramientas de gestión para la mejora continua de la calidad de sus servicios y la satisfacción de las expectativas de sus visitantes.

La distinción se ha conseguido por medio de una auditoría externa que ha acreditado al comité de evaluación del ICTE (Instituto para la Calidad Turística Española) el cumplimiento de la Norma en materia de gestión de Calidad de Uso Público en Espacios Naturales Protegidos.

Atendiendo a que la oferta de actividades para los visitantes del Parque es cada vez más abundante y compleja, lo que conlleva un mayor esfuerzo de gestión y organización de los equipos que trabajan en el área de uso público, el Sistema de Calidad es una herramienta idónea que permite organizar la gestión y facilitar la labor sistemática de las personas que trabajan en el parque.

Además, al establecer una serie de criterios en la oferta de servicios y equipamientos, se garantiza una mejora en la atención a los visitantes y una mayor satisfacción en la visita, lo que redundará en un mayor aprecio de los recursos que se tratan de conservar. La “Q” aporta prestigio, diferenciación, fiabilidad, rigurosidad y promoción.