ISABEL BARRANTES 

 

El Ejecutivo regional ha informado que la deuda de Extremadura, a 30 de septiembre de este año, asciende a 3.966 millones de euros, lo que supone 53 millones de euros menos que en el mes de junio que era de 4.019 millones.

A las entidades del sector público le corresponden un total de 24 millones de euros, por lo que la diferencia, 3.942 millones de euros, corresponde a la Administración General.

De acuerdo con estas cifras, la carga por habitante asciende a 3.636 euros. Muy inferior a la deuda del conjunto autonómico que alcanzaba en el mes de junio los 5.904,5 euros.

Según señalan desde el Ejecutivo, la disminución del endeudamiento de la Junta de Extremadura trae causa de las operaciones de crédito a corto plazo que, para cubrir sus necesidades transitorias de tesorería y ponerse al día con el periodo medio de pago a proveedores, han sido formalizadas conforme al acuerdo de Consejo de Ministros de 26 de febrero de 2016, por el que se autorizaba la concertación de operaciones de este tipo hasta un importe máximo de 400 millones de euros.

A 30 de septiembre de 2016, el saldo de estas operaciones asciende a 17 millones de euros. De modo, que en la actualidad, estas operaciones están canceladas casi en su totalidad.

En definitiva, estas operaciones han contribuido a reducir el plazo medio de pago a proveedores.