ICIAR MUÑOZ

La empresa extremeña Cambio Energético, con sede en Coria, ha diseñado e instalado la mayor planta solar para autoabastecimiento de energía en las islas Canarias, concretamente en una granja caprina fabricante de los quesos artesanales Lomo Blanco, situada en el municipio de Betancuria (Fuerteventura).

Esta instalación solar fotovoltaica, aislada de la red eléctrica, es en este momento la planta autónoma más grande de las islas Canarias y una de las mayores de la península.

La actuación ha sido ejecutada por Cambio Energético, empresa extremeña pionera en el sector del autoconsumo fotovoltaico que centra su actividad en proyectos de energías renovables y eficiencia energética, según ha informado la mercantil en un comunicado.

La empresa surgió en Coria en el año 2009 y es responsable de las primeras instalaciones de autoconsumo en suelo extremeño, con una tienda online de referencia en materia energética.

También ha realizado obras para el abastecimiento sin conexión a la red eléctrica de varias infraestructuras de la Junta de Extremadura, como la presa de Burguillos del Cerro o Los Ángeles en Pinofranqueado.

Actualmente su red comercial se extiende por todo el Estado con sedes en Madrid, Andalucía, Baleares, Castilla la Mancha, Castilla y León, País Vasco y Canarias.

La instalación fotovoltaica en la granja de quesos Lomo Blanco consta de 120 placas que transforman la energía solar en electricidad, logrando una producción diaria que variará entre los 100 Kw durante el invierno y un máximo de 170 Kw en verano.

Tanto el suministro trifásico como la producción y el estado de los equipos están monitorizados telemáticamente, lo que garantiza un suministro ininterrumpido.

"La instalación solar demuestra que es posible y rentable la sustitución de las fuentes de energía convencionales por energía solar fotovoltaica para obtener ahorros económicos importantes, además de contribuir a un medio ambiente más sostenible", ha explicado el gerente de la empresa, Ramón Jesús Domínguez.

Los titulares de la explotación de quesos artesanales, los hermanos Teodoro Celestino Peña y Pedro Celestino Peña, contarán a partir de ahora con una instalación aislada de la red de suministro eléctrico, que les supondrá un ahorro considerable en comparación con el consumo de gasoil que necesitaba el complejo ganadero (3.500 euros al mes).

 

La energía procedente de las placas fotovoltaicas permitirá alimentar la bomba hidráulica de la ordeñadora de cabras, los tanques de frío y calor necesarios para el tratamiento de la leche, la cámara frigorífica para el curado de los quesos, la bomba para abastecer de agua a las cabras en toda la montaña, equipos de oficina y toda la iluminación del complejo ganadero.