ICIAR MUÑOZ

El Parque Nacional de Monfragüe  pertenece a una de las Áreas Importantes para la Conservación de las Aves y la Biodiversidad (IBA) más amenazadas del mundo, según los datos del último estudio de BirdLife International y de la que forma parte SEO/BirdLife.

La organización conservacionista Birdlife ha señalado en una nota que ha identificado 422 espacios en situación de riesgo crítico repartidos en 100 países. El área en peligro supone un 3,5% del total de las Áreas Importantes de la Conservación de las Aves y la Biodiversidad, que suman 12.000 en todo el mundo.

Los datos forman parte del seguimiento de las Áreas Importantes de la Conservación de las Aves y la Biodiversidad realizado por BirdLife International y sus socios, que aportan información sobre el estado de conservación de las diferentes áreas al término de 2015.

La mayor parte de los puntos amenazados, aproximadamente unos 200, son humedales, uno de los ecosistemas más frágiles del planeta. En la lista figuran 70 espacios húmedos considerados de importancia internacional según el Convenio de Ramsar y 11 lugares Patrimonio de la Humanidad, entre los que se incluyen Doñana y los Everglades, en Estados Unidos.

España cuenta con 469  Áreas Importantes de la Conservación de las Aves y la Biodiversidad distribuidas por todas las comunidades autónomas y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Andalucía, con 72, encabeza la lista por número de Áreas Importantes de la Conservación de las Aves y la Biodiversidad  y hectáreas cubiertas, seguida de Castilla y León con 68 y las Islas Canarias, 67.

Más de 18 millones de hectáreas del territorio se encuentran dentro de alguna de las Áreas Importantes de la Conservación de las Aves y la Biodiversidad, a lo que se suman más de 5 millones correspondientes a las IBA en superficie marina.

Dentro del país, las dos IBA en peor situación -de acuerdo con el inventario- son Monfragüe y la isla de Conejera, que incluye a los islotes de Bledes y Espartar, muy próximos a Ibiza. En ambos puntos, la situación de riesgo es "muy alta", se ha agregado en el comunicado.

En el caso del paraje extremeño, lugar de cría de rapaces amenazadas como el águila imperial ibérica, su estado crítico se debe a la combinación de múltiples causas. "Entre otras figuran el impacto de la agricultura, el efecto del cambio climático, la caza ilegal, la contaminación o los efectos de las especies invasoras", según ha explicado el técnico de SEO/BirdLife, Octavio Infante.

Infante ha subrayado que el inventario especifica que los trabajos de conservación en la zona "muestran una tendencia favorable a la recuperación del espacio aunque la respuesta del entorno a estas acciones es lenta"