LUCIA SEMEDO-MERIDA

 

El fuego arrasó cerca de 12.000 hectáreas en Extremadura el pasado año, debido principalmente al incendio de Sierra de Gata, que quemó cerca de 8.000 hectáreas, y al de Logrosán que afectó a más de 750 hectáreas. 

Cabe destacar que esta cifra es notablemente superior a la de 2014 que se situaba en poco más de 4.000 hectáreas de campo extremeño arrasado por las llamas. Con este motivo la delegada del Gobierno en Extremadura, Cristina Herrera, ha pedido la colaboración ciudadana tanto en materia de prevención como de información. 

Por su parte el jefe de la Unidad de Protección Civil de la Delegación del Gobierno en Extremadura, Eugenio Garcés, ha explicado que las elevadas lluvias registradas en los últimos meses en la región hacen pensar que no se producirán incendios de tanta gravedad como los ocurridos el pasado verano. 

A pesar de ello, Extremadura contará con los mismos medios con los que disponía en 2015 y entre los que se encuentran tres cuadrillas de 17 combatientes, dos helicópteros biturbina, un “bombardero” Kmov y un hidroavión tipo “Canadair”,