ISABEL BARRANTES 

 

Las primeras cerezas del Valle del Jerte, concretamente la variedad navalinda, han comenzado a certificarse por parte de la Denominación de Origen Protegida “Cereza del Jerte”. Se trata de la única variedad que tiene rabito o pedúnculo. 

Según indican desde el Consejo Regulador, el inicio de la certificación supone la llegada al mercado de las primeras cerezas que cuentan con la contraetiqueta que garantiza su máxima calidad. 

La previsión de cereza navalinda para esta campaña variará entre los 600.000 y los 700.000 kilos, según el presidente del consejo, Ignacio Montero. 

Cabe destacar que la campaña de este año se ha visto retrasada por las lluvias y el frío durante la floración, sin embargo se espera tener una producción de calidad aunque “de menor cantidad”, ha señalado Montero.