LUCÍA SEMEDO

 

La Asociación Greenpeace ha solicitado información al Consejo de Seguridad Nuclear sobre si la Central Nuclear de Almaraz cuenta con alguno de los 400 componentes defectuosos que la firma francesa Areva empleó en instalaciones de este tipo.

El colectivo ecologista ha emitido un comunicado en el que pide a este organismo que “aclare públicamente y con urgencia si ha recibido información de si Ascó y Almaraz pueden tener generadores de vapor que no cumplen con los estándares de calidad". Además, a esta petición ha sumado la de contar con una lista de las piezas y componentes procedentes de Areva empleados en el país.

La responsable de Energía Nuclear de Greenpeace, Raquel Montón, ha manifestado que "la seguridad nuclear no ocurre por la mera existencia del CSN, sino porque este trabaje para cumplir sin excusas los requerimientos de seguridad en todo momento".

A finales del mes de abril la empresa gala de Areva confirmó a la institución de seguridad nuclear de Francia que se habían detectado 400 irregularidades en componentes producidos desde el año 1965 que se habían distribuido a centrales nucleares en distintos puntos de Europa.

Debido a esto Greenpeace no descarta que algunos elementos puedan estar en España aunque “aún no está claro que hayan recibido alguno de los elementos defectuosos y se espera que a finales del próximo mes de mayo el regulador francés reciba toda la información de Areva", han añadido.

Greenpeace ha indicado que estas irregularidades incluyen "inconsistencias, modificaciones u omisiones en los archivos de producción en relación con los parámetros de fabricación o resultados de las pruebas".