ISABEL BARRANTES
Diversos actos vandálicos han provocado la muerte por envenenamiento del Roble Grande de La Solana, catalogado como Árbol Singular de Extremadura y que estaba situado en el término municipal de la localidad jerteña de Barrado.
Así lo ha denunciado la Asociación de Turismo del Valle del Jerte, que a través de su perfil en las redes sociales ha explicado que “una de las joyas naturales del valle y un orgullo para Barrado ha sido objeto de un sinsentido”.
Además han instado a aquellos que puedan tener algún tipo de información a que lo pongan en conocimiento de las autoridades.
Cabe destacar que se trata de un roble de unos 300 años de edad, con una altura de 18 metros y un perímetro máximo de tronco de 3,60 metros.
Asimismo es un árbol que por su belleza estructural y su antiguo uso como lugar de reunión, está muy valorado por los vecinos de esta población.
