ISABEL BARRANTES 

 

Extremadura ha cerrado el cuarto trimestre de 2015 con una deuda de 3.576 millones de euros como consecuencia de la formalización de la adenda al contrato de préstamo entre la Comunidad Autónoma y el Instituto de Crédito Oficial (en representación de la Administración General del Estado) con cargo al Fondo de Financiación a Comunidades Autónomas, a través del compartimento Fondo de Facilidad Financiera; y derivado, a su vez, del déficit excesivo de 2014.

Mediante esta adhesión, a Extremadura se le han asignado recursos adicionales destinados a cubrir necesidades de financiación derivadas de déficits de ejercicios anteriores.

Estos recursos fueron aprobados por acuerdo de la Comisión Delegada para Asuntos Económicos con fecha 20 de noviembre de 2015, y dado que la deuda mide la cantidad de dinero que se pide prestado para cubrir el déficit, Extremadura recibió, por el déficit excesivo de 2014, 280 millones en concepto de Facilidad Financiera.

Por tanto, si tenemos en consideración la deuda formalizada del Banco de España y que al cierre de 2015 asciende a 3.576 millones de euros y la no formalizada del mismo periodo (déficit 2015), que suman 525 millones, Extremadura estaría en los 4.000 millones de euros que el presidente del Ejecutivo predijo en el mes de septiembre.