ISABEL BARRANTES
El Ejecutivo regional invertirá 92 millones de euros en la prolongación de la autovía autonómica EX-A1 hasta el municipio luso de Monfortinho siempre que el gobierno portugués continúe esta vía hasta la carretera A-23 que enlaza con Castelo Branco, según ha indicado el director general de Infraestructuras de la Consejería de Economía e Infraestructuras de la Junta, José Luis Andrade.
Ésta se acometería en dos tramos de poco más de 18 kilómetros de longitud en total. Un tramo sería la unión de Moraleja Oeste con Cilleros y otro el enlace de este último municipio con Portugal.
El director general ha reconocido que se trata de una cuantía económica importante por lo que la respuesta del gobierno luso será fundamental para establecer la planificación de esta obra que formaría parte del plan concertado de infraestructuras que se prevé presentar a lo largo del próximo verano.
Andrade ha añadido que con este motivo la Junta de Extremadura consultará con el Ejecutivo portugués cuáles con sus intenciones, puesto que prolongar la A-23 desde Castelo Branco a Monfortinho supondría asumir una obra para convertir 70 kilómetros de carretera en autovía.
De esta forma los usuarios de la EX-A1 contarían con un enlace directo que facilitaría la comunicación tanto con Oporto como con Lisboa, las ciudades más importantes del país vecino.
Cabe destacar que la EX-A1 parte de Navalmoral de la Mata donde enlaza con la A-5, por lo que su puesta en marcha facilitó el acceso a Plasencia desde Madrid. Además el pasado año se llevó a cabo la apertura de la prolongación hasta Coria y Moraleja y de ahí a Monfortinho, una actuación que está pendiente de ejecución.
