LUCÍA SEMEDO
La Dirección General de Tráfico ha puesto en marcha una nueva campaña de vigilancia especial y control de camiones y furgonetas en Extremadura, una medida que arranca este lunes y que se prolongará durante toda la semana. En total, se prevé que se controlen cerca de 600 vehículos.
Según han indicado desde la Delegación del Gobierno en Extremadura, se utilizará “el máximo número de medios humanos y materiales disponibles”, lo que suponen unos 400 efectivos de Guardia Civil de Tráfico.
En el marco de esta medida se llevarán a cabo inspecciones sobre los vehículos para comprobar el estado de sus autorizaciones y documentos, condiciones técnicas o elementos de seguridad entre otros aspectos. También se requerirá a los conductores documentos como el permiso de conducción, tiempos de conducción, descansos y alcohol.
Desde la Delegación han recordado que la conducción de una furgoneta no es igual que la de un turismo, sobre todo en los casos en los que va cargada. En cuanto a esta carga han calificado de vital la sujeción, así como cualquier desplazamiento de la misma, que incide en la estabilidad del vehículo.
Esta Delegación ha confirmado que este tipo de vehículos cuentan con una incidencia de salidas de vía y vuelcos más alta que en muchos casos va ligada a esa mala colocación y gestión de la carga. Este tipo de vehículos cuenta con un mayor riesgo que los turismos de sufrir un siniestro.
En 2014, de los cerca de 520 fallecidos en accidentes de tráfico con camiones y furgonetas, más del 65% de los muertos eran ocupantes de otros vehículos o peatones.
