El alcalde de Coria se ha reunido con las familias afectadas por la explosión del pasado domingo para conocer de primera mano su situación y brindarles el apoyo del consistorio. 

Pese a que la deflagración no ha producido daños personales a ninguna de estas personas se han visto obligados a abandonar sus viviendas por los daños estructurales que han sufrido los edificios.

El primer edil ha destacado que solo una de las familias ha recurrido a un hotel, mientras que el resto ha preferido quedarse en casas de familiares. Ballestero ha destacado que aún no saben cuanto tiempo se demorarán las investigaciones hasta dar con las causas del suceso, por lo que no puede adelantar cuando podrán volver a sus casas. 

Ballestero ha indicado, no obstante, que “se han descartado daños en la estructura de los edificios y que los desperfectos se limitan a puertas, ventanas y otros aspectos superficiales”. Aún así, el alcalde ha reiterado que “es importante ser cautos en este sentido y hay que dejar que los expertos determinen cuando podrán regresar los afectado a sus hogares”.