La Plataforma de Vegaviana ya cuenta con alrededor de 2.000 firmas de apoyo para la petición de arreglo de las vías de entrada y salida del municipio. Este colectivo conformado por los vecinos de la localidad ha elevado reiteradas quejas a Confederación Hidrográfica del Tajo, actual titular de la carretera, para que subsane los problemas que presenta en el firme y en el trazado.

Los miembros de este grupo han filmado dos documentales y han elaborado un álbum de imágenes en los que muestran el estado que muestra la vía, lo que genera no solo desperfectos en los vehículos que se desplazan por ella sino también riesgos para los conductores.

La Plataforma de Vegaviana ha enviado más de 300 cartas al presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, Miguel Antolín, solicitándo soluciones para el problema. Además han presentado las firmas recogidas ante el Defensor del Pueblo. Las rúbricas de apoyo han sido recogidas en localidades cercanas, como Cilleros, Zarza y Moraleja.

Estas carreteras, que unen Vegaviana con Moraleja y con Zarza la Mayor, son las únicas vías de acceso al municipio, por lo que los vecinos se ven obligados a transitar por ellas.

 

 

 

TRÁMITES PARA LAS MEJORAS

El Ayuntamiento de Vegaviana lleva varios meses trabajando para obtener soluciones con respecto a las vías. Al ponerse en contacto con Diputación Provincial de Cáceres, esta institución indicó que estaba dispuesta a hacerse con la titularidad de la vía y responsabilizarse de su mantenimiento.

El vicepresidente segundo de la Diputación de Cáceres, Saturnino López Marroyo, ha explicado que la demora en el inicio de las obras de la carretera que une Vegaviana con Moraleja obedece exclusivamente a cuestiones jurídicas y ha reiterado el compromiso firme de asumir el mantenimiento de la vía, una vez que sea mejorada por la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHt), que es la propietaria de la carretera.

Se da la circunstancia de que ha sido necesario recurrir a la figura jurídica denominada mutación demanial que implica el cambio de afectación de un bien o derecho de dominio público a un fin o servicio público distinto, es decir, una desafectación y una afectación simultáneas, tal y como explicó López Marroyo en declaraciones a Radio Interior. Esta fórmula será la misma que se aplique en el caso de la carretera de La Moheda de Gata, que aún es propiedad de CHT a pesar de que la Diputación de Cáceres se encarga de su mantenimiento desde que se abriera al tráfico tras su modernización hace ahora poco más de un año.