El Extremadura Arroyo ha comenzado a apuntalar su proyecto en Superliga con la contratación en las últimas horas de la internacional natural de Moraleja,  Alba Sánchez, una de las promesas del voley español, que ha decidido decantarse por el club extremeño, dejando a un lado ofertas de equipos de primera línea de varios países.

  Sánchez nació en la localidad cacereña de Moraleja (9-9-91), comenzó a dar sus primeros pasos en el mundo del voley con tan solo ocho años, dentro del Patronato de Deportes de Moraleja, de donde pasaría al Club Voleibol Moraleja, cuando comenzó a ser seguida por la Federación Extremeña y a formar parte de sus equipos de base, tal tal y como ha informado el club en nota de prensa.

  Tras militar dos temporadas en el CV Medina Cauria Óptica Solano de Coria, Alba pasó a formar parte de la Selección Española Júnior, en el Centro de Alto Rendimiento que la Española mantiene en Soria, donde compitió en FEV y donde adquierió experiencia internacional, con la disputa de varios torneos y campeonatos en Hungría, Bélgica y Francia, así como en otros estados europeos.

  En 2007 fichó por el CV Benidorm, en 2009 es contratada por el CV Diego Porcelos Universidad de Burgos de Superliga, equipo con el que renueva en 2010; en 2011 debuta con la Selección Española absoluta y en 2012 ficha por el UCAM Murcia, en una campaña en la que logra ser la jugadora más veces nominada (9), junto a Marisa Martínez, sumando además 2 MVP.

 

  

  

  

  

  

  

  

  

  

  

El técnico cacereño, Adolfo Gómez, quien ha llevado directamente las negociaciones con la jugadora extremeña, ha afirmado sentirse "tremendamente feliz, porque poder contar la próxima campaña con Alba, supone para nosotros tener a nuestro lado a una de las mejores jugadoras del voley español, pero es que además se trata de una chica a la que sigo de cerca desde hace muchos años y por la que nunca escondí mi admiración y mi intención de que llegase el día en que jugara en Arroyo de la Luz".

  

Alba Sánchez (1.80 metros) desempeña funciones de receptora y atacante de ala, aunque su versatilidad ha propiciado que pueda llegar a cabo otras responsabilidades en momentos puntuales de un partido.

  

La jugadora, por su parte, ha señalado que se encuentra "muy ilusionada a la vez que fuertemente responsabilizada", de formar parte del proyecto del Extremadura Arroyo en la élite del voleibol femenino español.

  

En ese sentido ha reconocido que disponía de otras ofertas encima de la mesa, alguna de ellas de fuera de España y otras de equipos punteros ya contrastados en Superliga, "pero cuando Adolfo me hizo saber de su interés, primero paralicé el resto de negociaciones, porque notaba ese afecto y esa disposición a hacerse con mis servicios, y después decidí aceptar la propuesta".

  

"Por otra parte no puedo esconder que hasta este momento era complicado soñar con la posibilidad de jugar en Superliga con un equipo de mi tierra, en donde aprendí, pero ahora es una circunstancia que me motiva y me responsabiliza a dar lo máximo para intentar dejar al Extremadura Arroyo lo más arriba posible en la clasificación, y seguir así con su meteórica trayectoria", ha concluido.