El diagnóstico de apneas del sueño, utilizando un equipo simplificado en el domicilio del paciente, puede ofrecer una eficacia similar a la del sistema tradicional de diagnóstico realizado en el hospital de forma vigilada, según las conclusiones de un estudio multicentro coliderado por el Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres, que publica este mes la revista científica Sleep.

El síndrome de apneas del sueño es una enfermedad que afecta al 25% de los adultos, la mayoría de ellos sin diagnosticar, y se caracteriza por oclusiones repetidas de la faringe durante el sueño. Los síntomas principales son ronquido, paradas respiratorias, cansancio o somnolencia diurna excesiva.

Se trata de un problema de salud pública de primera magnitud debido a que favorece la aparición de hipertensión arterial, enfermedades cardio y cerebrovasculares, accidentes de tráfico y mayor mortalidad.

El diagnóstico tradicional se realiza durante una estancia de una noche en el hospital, registrando diferentes señales biológicas con un sistema de vigilancia específica conocido como polisomnografía. El principal inconveniente es que esta prueba es costosa y, en consecuencia, impide dimensionar los laboratorios de sueño para poder atender toda la demanda necesaria.

Por esa razón se han hecho grandes esfuerzos en investigación para intentar simplificar el diagnóstico, y se han desarrollado dispositivos más sencillos que el paciente puede colocarse en su domicilio para obtener el diagnóstico mediante un método conocido como poligrafía respiratoria.

Sin embargo, se consideraba que estos dispositivos no eran tan eficaces como la polisomnografía porque no registran si el paciente está dormido o no y, en caso de que se despierte, estima por debajo de lo real el número de apneas. Este estudio demuestra que la infra-estimación no es relevante, por lo que no es una limitación para el uso regular de esta prueba diagnóstica.