La Asociación Gremial de Taxistas anuncia un "cese de hostilidades" y recoge "el guante" lanzado por el alcalde de Plasencia, Fernando Pizarro, durante el pleno ordinario celebrado esta semana en el que el dirigente local se ofreció a dialogar con los taxistas que demandan volver a instalarse en la parada de la Plaza Mayor.

El colectivo de profesionales ha tomado esta decisión por mayoría y como gesto de "buena voluntad" no organizarán ningún acto de reivindicación ni protesta. Han demandado que la reunión se celebre de manera urgente, durante los primeros días de la próxima semana, y además, han exigido que en dichas negociaciones no participe el concejal de Tráfico e Interior José María Nisa.

El portavoz de los taxistas, Carlos Pena, ha indicado que no están dispuestos a sentarse con Nisa porque se sienten insultados tras la intervención del edil en esa misma sesión plenaria. Hay que recordar, que el concejal de Tráfico manifestó que con la recogida de firmas de apoyo entre los ciudadanos se había producido una "falta de respeto" porque no se estaba diciendo toda la verdad. También dejó claro que el equipo municipal de Gobierno no cederá a "chantajes ni manipulaciones".

Los taxistas se han mostrado muy molestos ante estas palabras y por lo tanto han pedido que el representante municipal no siga siendo el interlocutor en dichas negociaciones.

Pena ha mostrado su confianza en que puedan dialogar con Pizarro y llegar a un punto de entendimiento a la mayor brevedad posible.