La cooperativa La Milagrosa, de Monterrubio de la Serena (Badajoz), tiene previsto recolectar 2,5 millones de kilos de aceitunas de las variedades picual y cornezuelo en el ámbito geográfico de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Aceite Monterrubio, según los datos ofrecidos ayer con motivo del inicio de la campaña de recogida.
El gerente de la sociedad, Juan Carlos Medina, explicó que las previsiones apuntan a una reducción del 70% de la producción con respecto al año anterior, período en el que se recolectaron 8 millones de kilos que permitieron la elaboración de más de 1,4 millones de kilos de aceite de oliva virgen extra. La disminución de la cosecha en la presente campaña reducirá la producción de aceite de oliva virgen extra hasta los 453.200 kilos.
Según estos datos, La Milagrosa de Monterrubio recolectará 234.000 kilos de aceitunas ecológicas para la elaboración de, aproximadamente, 40.000 kilos de aceite obtenido mediante labores agrícolas tradicionales respetuosas con el medio ambiente y la seguridad alimentaria.
Esta disminución tan importante es generalizada en todo el territorio nacional y la causa principal de la merma de la cosecha hay que atribuirla en buena medida a la escasez de precipitaciones durante los primeros meses del año, pero también a una ola de aire caliente que recorrió la Península en mayo, mes clave para la floración del olivar, que contribuyó a que se secara la flor y evitó la germinación del fruto.
La reducción de la cosecha ha contribuido a un incremento generalizado de los precios desde el pasado mes de agosto, un factor que puede parecer positivo, pero que no paliará la fuerte reducción de renta que sufren los agricultores como consecuencia de la reducción de la producción.
A pesar de todo, La Milagrosa de Monterrubio confía en obtener aceites de gran calidad debido a que el escaso fruto desarrollado en el árbol ha tenido una maduración lenta que se considera idónea para elevar las características, olfativas, y degustativas del aceite.
El gerente de la sociedad cooperativa explicó que se prevé un año especialmente difícil para el agricultor en el que se acusará un incremento en los costes de recolección, ya que la escasez de aceitunas contribuirá a la recolección manual, incrementando los gastos.
El inicio de la campaña se ha caracterizado por la dificultad de los agricultores para acceder a las explotaciones como consecuencia de las intensas precipitaciones de los últimos días, que han anegado las tierras, haciendo especialmente tediosas las labores agrícolas.
