La Asociación de Usuarios de Cajas, Bancos y Seguros (ADICAE) de Extremadura ha detectado en las últimas semanas un aumento en el número de consultas de los consumidores extremeños a consecuencia del encarecimiento de los precios que se está registrando en algunos productos de primera necesidad,  como consecuencia de la subida del IVA que se aplicará a partir del 1 de septiembre.

A pesar que algunos sectores han anunciado que no trasladarán dicho aumento al consumidor, lo cierto es que en el caso de los productos básicos del hogar, se está registrando un incremento de precios que no puede imputarse al incremento del impuesto.

Por ello, ADICAE advierte a los consumidores que comparen los precios en diferentes supermercados y acudan a las oficinas de la asociación o al Instituto Extremeño de Consumo si detectaran una práctica abusiva en el alza de los precios, tal y como informa el colectivo en nota de prensa.

"Los consumidores nos han llegado a comentar una subida del 33% en productos alimenticios con IVA reducido y hasta el 50% en el caso de bebidas de cola", señala desde Adicae Extremadura el Secretario General, Carlos Arjona, quien advierte de la pérdida de poder adquisitivo que sufrirán principalmente los consumidores con rentas bajas y medias porque se encarecen los productos básicos en los que se centran su consumo.

"Una familia de tipo medio gasta seis de cada diez euros en productos que tributan a tipos reducido o superreducidos que ahora lo harán a tipos superiores. Ello supone un fuerte impacto negativo para estas rentas y  redundará en una nueva caída del consumo".

La Asociación recomienda estar atentos a los precios e informarse debidamente de las subidas porque todo costará "un poco más" a partir de septiembre, pero debe ser en la misma proporción y cuantía que el impuesto, no más.

 

Productos a los que afecta la subida

El IVA es un impuesto indirecto que recae sobre el consumidor final y al no ser progresivo, como el IRPF, no se paga en función de los ingresos sino por la adquisición de productos o la prestación de servicios.

La subida del tipo general del IVA pasará del 18 al 21 por ciento y la reducida del 8 al 10 por ciento, mientras que los productos de primera necesidad, alimentos frescos fundamentalmente, se mantendrán en el tramo superreducido del 4 por ciento.

Pero mientras que los productos y servicios más básicos no sufren variación, libros incluidos, el material escolar, por ejemplo, experimenta una fuerte subida, ya que pasa del 4 al 21 por ciento.

Las facturas de luz, gas y telecomunicaciones sí afectarán notablemente al desembolso familiar porque se cobrarán en septiembre con el nuevo tipo del 21%, aunque corresponda a consumos efectuados en meses anteriores.

La factura del agua pasa del 8% al 10%. En este tramo se incluyen también las actividades agrícolas, ganaderas o forestales; las gafas graduadas y lentillas; los servicios de transporte de viajeros y mercancías; restaurantes y balnearios; servicios de limpieza y recogida de residuos; construcción y rehabilitación particular de la vivienda; espectáculos deportivos; entrada a museos y exposiciones, etc., entre otros.

Se mantiene al 4% el pan, cereales, verduras, legumbres, frutas y hortalizas, huevos, leche y quesos; libros, revistas y periódicos; medicamentos; prótesis y viviendas de protección oficial.