CCOO de Extremadura ha denunciado que la Cámara de Comercio de Badajoz ha despedido a nueve trabajadores en el último día del año, sin el aviso previo necesario y sin comunicar las causas que lo justifiquen.

La Federación de Servicios Financieros y Administrativos de CCOO de Extremadura (Comfia) considera que se trata de un posible ERE encubierto, realizado con nocturnidad y alevosía, y apoya a los trabajadores en su denuncia a la Inspección de Trabajo.

El despido se produjo a última hora de la mañana del 30 de diciembre, es decir, cuando los trabajadores tenían menos capacidad de reacción. A esa hora se presentaron en la dependencias de la Cámara de Comercio de Badajoz, el director de la entidad y un abogado, para comunicar a nueve trabajadores su despido, incluido el delegado sindical y sin cumplir el preceptivo plazo de preaviso de 15 días que establece la normativa.

Ninguno de los trabajadores tiene la carta de despido, al negarse estos a la firma del documento que recogía el saldo y finiquito que tenían preparado, lo cual impediría reclamar aquellas cantidades o derechos que los trabajadores entendieran que les pudiera corresponder.

Esta situación generaría indefensión total, pues al no tener la carta de despido, los trabajadores tampoco podrían solicitar la prestación por desempleo, ni preparar reclamación alguna contra la decisión del despido, ya que apenas han podido leer las causas alegadas del despido.

Los trabajadores afectados, han intentado acudir a su puesto de trabajo, al no tener la carta de despido en su poder, pero un vigilante de seguridad, contratado expresamente para la ocasión por la Cámara de Comercio, les ha impedido la entrada.

Además, la empresa ha procedido al cambio de todas las cerraduras para impedir el acceso de los trabajadores a su puesto de trabajo.

Ante esta situación, los trabajadores han decidido presentar la denuncia correspondiente ante la inspección de Trabajo.

Desde Comfia-CCOO se rechaza totalmente la forma de hacer en este proceso, similar a un posible ERE encubierto a última hora del último día del año, sin previo aviso y sin contar con la representación de los trabajadores, es decir, sin el dialogo y la racionalidad requerida en estos casos. 

CCOO ha solicitado a la Cámara de Comercio, que no es una empresa al uso, sino de marcado carácter público, que justifique documentalmente las causas objetivas de los despidos, pero la empresa se ha negado a ello.

Tampoco facilita la documentación económica correspondiente, el plan de viabilidad empresarial, la definición los criterios utilizados en la selección de las personas afectadas ni inicia el proceso de dialogo y negociación requerido en estos casos con la representación legal de los trabajadores.